1. Con un registro de 9.5 en MMS, el terremoto de Valdivia en Chile tuvo lugar el 22 de mayo de 1960 y es el sismo más fuerte registrado hasta la fecha. Golpeando a Lumaco en el centro de Chile, los afectados tuvieron que vérselas no sólo con los daños causados directamente por los temblores, también con los deslizamientos de tierra, las inundaciones y las erupciones volcánicas que se desataron.
2. Los temblores no se pueden predecir. Actualmente no hay herramientas lo suficientemente avanzadas como para dar información muy precisa. La NASA cuenta con tecnología que puede detectar dónde podría haber un temblor, pero no ha llegado al punto de poder decir cuándo. Pronosticar, se puede. Predecir, no tanto.
3. Se cree que un millón 100 mil personas murieron a causa de los sismos ocurridos en el este del Mar Mediterráneo (Siria y Egipto). En 1556, 830,000 muertes más ocurrieron en la provincia de Shaanxi, China, en similares circunstancias.
4. Los terremotos pueden alterar el tiempo. La duración de un día se encuentra intrínsecamente ligada a la velocidad en que la Tierra completa una rotación sobre su propio eje; entonces, se puede deducir, que si el movimiento de rotación de la Tierra fuera interrumpido de forma repentina y violenta, el tiempo que tardaría en completar su rotación se vería alterado. Lo creas o no, esto es exactamente lo que puede suceder como resultado de sismos particularmente fuertes. La NASA ha sugerido que el terremoto de Valdivia de 1960 y el terremoto de Japón de 8.9 grados de magnitud de 2011 impactaron el eje del planeta de forma leve, reduciendo la duración del día en 1.8 microsegundos… y por eso llegué tarde al trabajo.
5. Los animales pueden predecir temblores. Ok, no está comprobado... pero parece ser cierto. Varios científicos que trabajan con animales han notado que estos presentan comportamientos extraños días anteriores a los temblores. Todavía no hay una explicación definitiva para esto, pero se cree que pasa porque varias especies pueden detectar actividad presísmica, como el cambio en los gases de la Tierra.
6. El sismo que dejó más damnificados ocurrió en Guatemala en 1976. Un millón de personas quedó sin casa y ocasionó daños materiales por 1.4 billones de dólares. Las pérdidas son comparables al que destruyó la capital nicaragüense en 1972: casi 1.3 billones dólares.
7. Hay aproximadamente 500,000 temblores al año. Pero no se preocupen: de esos, sólo 100,000 se pueden sentir, y sólo 100 causan algún daño.