El sismo se sintió a lo largo del país pero no se reportaron daños inmediatos, reportó la agencia DPA. Las autoridades sísmicas de Nueva Zelanda registraron una magnitud de 6,5 mientras el que centro geológico estadounidense, por su parte, habló de una magnitud de 5,3 en la escala de Richter y situaron el hipocentro a 150 kilómetros de profundidad, a 310 kilómetros al norte de la capital, Wellington.
Nueva Zelanda sufrió dos fuertes terremotos desde septiembre que causaron graves daños en la segunda ciudad del país, Christchurch.